Fuera de la noche que me cubre,
Negra como el abismo de polo a polo,
Agradezco a cualquier dios que pudiera existir
Por mi alma inconquistable.
En las feroces garras de las circunstancias
Ni me he lamentado ni he dado gritos.
Bajo los golpes del azar
Mi cabeza sangra, pero no se inclina.
Más allá de este lugar de ira y lágrimas
Es inminente el Horror de la sombra,
Y sin embargo la amenaza de los años
Me encuentra y me encontrará sin miedo.
No importa cuán estrecha sea la puerta,
Cuán cargada de castigos la sentencia.
Soy el amo de mi destino:
Soy el capitán de mi alma.
William Ernest Henley (1849–1903).
lunes, 9 de agosto de 2010
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4 comentarios:
NO hay almas inconquistables
....bueno eso de que no hay......
Di que sí Mar...Este GT no sé dónde se abrá dejado el dream, que no lo veo por ningún lado. Porque cuando no es esto de las almas, entonces es que todo es mentira...y así no se puede.Salva, así no se puede : )
Guauuu..cojonudo el poema ("No importa cuan estrecha sea la puerta, cuan cargada de castigos la sentencia...soy el capitán de mi alma"=el líder de mi raza) Quizá Madiba (Invictus) se dijo lo mismo en su intento de reconciliar la minoría blanca con la población negra post apartheid..¿no?
Y sí, Salva, estoy contigo..no hay almas inconquistables..(2-2)jajaja
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