martes, 3 de marzo de 2009

Johann Caspar Schmidt

"Nada prevalece sobre mí"... "Si fundo mi causa en mí, en el único, entonces se ha fundado en lo pasajero, en su creador mortal que se consume a sí mismo, y yo puedo decir:

He fundado mi causa en nada".

El único y su propiedado

Decir esto puede ser difícil, pero llevarlo a la práctica es otra historia. Una empresa faraónica. Aquí no se trata de levantar una pirámide, un constructo, un Ernest, sino de ser capaz de llegar a la tumba del faraón, al lugar donde se esconde el tesoro. Se trata de llegar a ese lugar en el que se encuentra tu verdadero yo, para poder crearte a ti mismo como tu propia obra de arte. Sin embargo, ¿a alguien se le escapa lo difícil que es llegar hasta ese corazón?, ¿alguien duda que tendrá que enfrentarse a los más terribles demonios? No, no se trata de dar un pasito hacia afuera sino de llevar a cabo esa acción temida por todos y cada uno de los seres humanos...

¡Mírate y verás!

4 comentarios:

supersalvajuan dijo...

Si me miro se rompe el espejo. ¿Esto lo pones por qué sabías que hoy iba a llover?

MULA_GARCÍA dijo...

¡nosce te ipsum!
libertad, pensamiento, belleza, corporeidad, amistad, solidaridad, pensamiento libre...TODO, y lo demás está de más.
(asombrada me quedo, por fin una nueva entrada en tu blog)

Eme (Nada que ver con eme dj)) dijo...

Entonces la respuesta era sí. Si tiene algo que ver con el nombre.

Eme (Nada que ver con eme dj)) dijo...

Conseguirlo implicaría conocerse a uno mismo y es casi imposible porque podemos pensar de una manera y actuar de otra muy distinta.

Llegar a conocernos a nosotros mismos implicaría entender las contradicciones,pero la propia naturaleza de la contradicción no nos lo permite , digamos que vemos el envoltorio pero no el contenido.